jueves, 30 de octubre de 2008

Tierno con sus hijas, durísimo corredor y gran líder

Admiro a Jorge por su espíritu de lucha, por su ejemplo que lo vive todos los días a pesar de las opiniones que no le son favorables. Es un hombre convencido de luchar, de la unión familiar, comprensivo con sus hijos, al mismo tiempo que ha sabido cómo guiarlos y en su caso, reprenderlos.

Lo mas maravilloso que he visto de Jorge es cómo se puede convertir en un hombre tierno con sus hijas (dice que lo convencen siempre con un beso, con un "oye papi", que hasta lo chantajean y le sacan todo lo que quieren....) y al mismo tiempo sigue siendo un gran líder.

El que "George" sea un hombre de familia para mí lo hace un hombre real, alguien común y corriente que puede ser tu amigo, tu vecino, tu papá. Es un hombre extraordinario, fraguado en muchísimas batallas, la verdad, pero muy cercano, que vive sus ideales con una profundidad tremenda.

No es un hombre de palabras, sino de acciones. Toda la gente que conoce a Serrano Limón, siempre dice que es un gran tipo, un tipazo, un luchador, pero siempre tienen un comentario con un toque personal. Eso quiere decir, que se da el tiempo, para conocer a la gente, tratarla y que lo conozcan.

Ha sido incansable y en su comité va a ser insustituible. Pocos podrían reunir todas las cualidades que él. Tenerlo al frente de una causa tan bonita y sana como que no mueran los bebés es algo muy afortunado para el país.

No he conocido a un hombre que se levante de situaciones tan difíciles como el cáncer y en lugar de buscar consuelo, da consuelo a los demás. Me contó que cuando supo que tenía ese cáncer, creo que en los ganglios, lo primero que hizo no fue llorar ni nada, sino dar gracias a Dios. O sea, puedes comprender cómo es realmente, que es alguien auténtico, porque no podría estar fingiendo sabiendo que estaba a un paso de la muerte. Dio gracias a Dios, oró con su inseparable Magda, y luego dio una batalla durísima y la ganó. Esa es la verdad.

No me cabe duda que Dios está con él, pese a que algunos lo vean como alguien muy recio y lo señalen de lo que quieran. Mi amiga médica Valentina me dice si a alguien le da cáncer en los ganglios será un milagro si sobrevive. Pero Jorge sí lo hizo. Junto a su esposa, como él recuerda todo el tiempo, y con el favor de Dios. Y ahí sigue, ahí está, ahí continúa.

Créanme que han crecido ya muchos niños que hubieran muerto por un aborto. Pero ahora son ya mayores y si supieran que gracias a los consejos y al empeño de Jorge es que están ahí, tal vez Jorge recibiría mucho más reconocimiento.


Pero es humilde y no busca protagonismos. Pero la verdad es que actúa como eso que dice que la mano derecha no sepa lo que hace la mano izquierda: él sólo defiende la vida, es el abogado de los que no han nacido aún, de esos micro.bebés que ya son seres humanos. Jorge los defendió desde el vientre de sus madres. Así nomas, eh? Eso no es poca cosa. Todos podríamos haber sido uno de esos niños y todos hubiéramos necesitado un Jorge ahí, que viera por nosotros, indefensos y con una mamá muy desorientada , buscando salir de una crisis.

Por eso es que Jorge es valioso. Y aquellos que lo han atacado son la verdad muy ignorantes de su labor tan bella. Pero la historia le hará justicia. Al tiempo se lo dejamos. Ya veremos todos.

Mireya Alonso

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